Aníbal ataca la ciudad de Roma, en su lugar ofrece a Roma términos para su rendición. Al fin y al cabo ya no tienen ejercito para defenderse.
El ejercito de Roma y el de Aníbal no entran en combate directamente.
Roma está haciendo tiempo.
Las tropas que Escipión mandó a la península ibérica han estado peleando contra Asdrúbal Barca... y Asdrúbal Barca está ganando, utilizando el apoyo de la caballería de Numida.
El hijo de Publio Cornelio Escipión, Publio Cornelio Escipión※ quién luego obtendría el titulo Africanus, se ofrece para tomar el control del ejercito - y ya que no había otro candidato, le fue otorgado el cargo.
※: Se llaman igual, en adelante hablo del hijo.
Escipión decidió atacar directamente Cartago Nova (Cartagena), la capital de Cartago en la península ibérica. Escipión ordena atacar por todos los frentes.
Gracias a la marea baja, las tropas logran cruzar por el norte - por donde no se esperaba un ataque - trepar la muralla y tomar la ciudad. Con Cartago Nova, el ejercito tiene los recursos para continuar la lucha.
Asdrúbal Barca decide llevar sus tropas a reunirse con las de Aníbal en Italia, para esto Asdrúbal sigue la ruta de Aníbal por los Alpes.
Cuando Asdrúbal deja la península ibérica, Masinisa - heredero del trono de Numida - queda atrás con su caballería, pero es derrotado por las tropas de Escipión en la Batalla de Ilipa. Masinisa concluyó que Roma estaba ganado la guerra, y decidió rendirse, uniendo sus tropas a Roma.
Las tropas romanas de Escipión marchan a Roma y fuerzan a Aníbal al sur de Italia. Dejando tropas estacionadas, una parte del ejercito regresa al norte para rechazar a Asdrúbal, quien muere en batalla.
Por su parte, Cartago al ver que Masinisa se rindió busca tomar control del pueblo de Numida. Para esto se alían con Sifax quien secuestra a Masiva, sobrino de Masinisa, y toma el poder de Numida.
Con la muerte de Asdrubal, Escipión pretende aprovechar la situación de Numida para invadir el norte de África, y el senado de Roma aprueba su plan.
Escipión con su ejercito libera a Masiva - el sobrino de Masinisa - y retorna a Masinisa al poder, ganando al pueblo de Numida como aliados.
Con el apoyo del pueblo de Numida, Roma ataca a Cartago. Cuando Cartago se queda sin un ejercito para defenderse, ordena a Aníbal dejar Italia y regresar para defender el territorio.
Al final, Cartago se rinde a Roma.
Comentarios
Publicar un comentario